Publicat per cedec el 12-09-2013

CEDEC, Centro Europeo de Evolución Económica, S.A. ofrece las claves de la Excelencia Empresarial


Corren tiempos difíciles para todas las empresas españolas, en especial para las pymes. Entre impuestos y adversidades derivadas de la crisis económica mundial, muchas empresas se encuentran en una situación más o menos comprometida, sumidas en cargas administrativas y fiscales, a las que se suman no pocos problemas de gestión y, cómo no, financiación y tesorería.

Es en este escenario en el que cobra especial relevancia tomar las decisiones necesarias y correctas que permitan a la empresa anticiparse a los problemas y actuar de forma eficaz. Para ello, es fundamental contar con la ayuda de profesionales expertos, pues ayudarán a estas empresas a fortalecer su situación actual y la guiarán en su camino hacia la Excelencia Empresarial.



Consultorías estratégicas en la gestión empresarial pueden ayudar en este sentido. Entre ellas, destaca CEDEC, Centro Europeo de Evolución Económica, S.A que desde 1965 ha ayudado a más de 50.000 empresas y Pymes europeas a conseguir sus resultados, colaborando en la implementación de procedimientos y herramientas de trabajo que les han permitido afrontar el reto del éxito allí donde otros han fracasado y conservar la misión, visión y valores de la empresa.

En una entrevista a Alberto Pijuán, Vicepresidente Europeo de CEDEC, se desgranan algunas de las claves para conseguir resolver dificultades empresariales y enderezar el rumbo para alcanzar la Excelencia Empresarial.

Destaca que para conseguir alcanzar la Excelencia Empresarial es necesario realizar una mejora en la estructura de la empresa y así poder anticiparse a los cambios del mercado. La experiencia de la empresa debe apoyarse en métodos de gestión actualizados, identificando los puntos débiles poniéndoles remedio para avanzar hacia un futuro más estable.

En empresas con dificultades, es importante acompañar al empresario en su reflexión, ayudándolo a encontrar respuestas alternativas a sus preocupaciones. Se hace necesario efectuar un diagnóstico, realizando a posteriori una propuesta de intervención.

Los consultores deben acompañar al cliente en la reorganización de la empresa. Este apoyo externo permite al empresario encontrar las líneas de actuación específicas para su empresa, definir y poner en marcha una organización jerárquica, motivar a su equipo y capacitarlo para asumir sus responsabilidades.

La experiencia y profesionalidad de CEDEC es tan extensa que le permite intervenir en la mayor parte de las PYMES y en grandes empresas cuya gestión es familiar, ya que estas deben enfrentarse a las mismas dificultades que cualquier Pyme. La sucesión en las empresas familiares es un problema que a menudo se plantea. El apoyo que aporta CEDEC  a las empresas durante el relevo generacional es esencial para que puedan preservar y aumentar su patrimonio empresarial y tener las mayores garantías de éxito y continuidad.

Los tres valores principales de CEDEC, asumidos por el equipo de más de 350 profesionales altamente cualificados que conforma la empresa, son el respeto al cliente, el respeto al colaborador y el respeto a las ideas. El trabajo del consultor es un trabajo de escucha activa del cliente. Es vital que el cliente entienda que la perseverancia es la cualidad más importante para el éxito. Nada puede sustituir la perseverancia si el objetivo de la empresa es conseguir la Excelencia Empresarial.

 

Imagen Grupo CEDEC

4 Comentaris

Deixa el teu comentari

Camp obligatori.
Camp obligatori/erroni.
Camp obligatori.

Pedro 16/09/2013

Todo lo que contais es exacto, mi pregunta es : quien se lo hace entender a los empresarios. Reflexion y accion correctiva esa es la clave... Me sigo preguntando, lo saben los empresarios? Si lo saben, porque no lo hacen?

CEDEC 17/09/2013

Desde CEDEC estamos convencidos que los empresarios saben que la actual situación exige la toma de decisiones concretas para adaptarse y dar viabilidad a las empresas. Lo estamos porque lo vemos constantemente en nuestras conversaciones con ellos. Sin embargo, el día a día de los empresarios es muy complejo y no les resulta sencillo ni hacer el análisis de la situación, ni valorar las alternativas. En nuestra opinión los empresarios no encuentran el momento de tomar las decisiones porque la gestión de los problemas urgentes les impiden hacerlo. Nuestra propuesta a los empresarios, consiste precisamente en eso: REFLEXIONEMOS JUNTOS Y VALOREMOS LAS ALTERNATIVAS DE SOLUCIÓN.

Adolfo T Dochado Soto 18/09/2013

El uso y el abuso del término emprendedor empieza a resultarme molesto. ¿Por qué tantos debates se esfuerzan en convencernos de las bondades de los EMPRENDEDORES y son tan escasos los que se refieren a la necesidad de que existan verdaderos EMPRESARIOS capaces de consolidar en el tiempo las ideas de aquellos? ¿Por qué se rehuye el término Empresario y se refuerza la falsa idea de que la panacea es ser Emprendedor? La realidad, como siempre, resulta tozuda y nos muestra un espectáculo mucho más desolador. De cada DIEZ emprendimientos viables sobre el papel (con buenos Planes de Negocio en su inicio), CINCO desaparecen (fracasan) durante el primer ejercicio de funcionamiento y otros TRES lo hacen antes de alcanzar el tercer año de vida. Es decir que el "nivel de supervivencia" de los emprendimientos apenas alcanza el 20%. ¡No puede decirse que sea un éxito! Pero el problema de los emprendimientos no acaba aquí. De los dos supervivientes, uno cambia de manos antes de alcanzar los cinco años de existencia y el otro lo hace alrededor de los siete años. Así pues, los EMPRENDEDORES, además de tener un ratio muy bajo de éxito resulta que buscan más un “éxito rápido” que les permita, si no enriquecerse, al menos financiar nuevos emprendimientos, que la consolidación de EMPRESAS CON FUTURO. Así pues, ¿constituyen los Emprendedores una verdadera solución para alcanzar un desarrollo económico sostenible? Yo creo que NO. No basta con ser EMPRENDEDOR (entendiendo por tal a quien tiene ideas y capacidad para llevarlas a la práctica en forma de negocio), hay que ser EMPRESARIO (entendiendo por tal a quien, además de saber emprender o iniciar un negocio, tiene la paciencia y la disciplina necesarias para mantener la idea de negocio viva en el tiempo, así como la capacidad de gestión para consolidar el negocio y convertirlo en una EMPRESA con futuro. Como profesional del mundo de la empresa no acabo de entender por qué se ha tomado como bueno el término EMPRENDEDOR, asumiendo para el mismo una asimilación inexistente con el término EMPRESARIO. ¡Hemos de estar alerta y no caer en la trampa de los términos "políticamente correctos" pero absolutamente incorrectos en el mundo real! Necesitamos EMPRESARIOS capaces de consolidar y hacer viables a largo plazo los proyectos emprendidos. Solamente esos Empresarios, con su paciencia, su resiliencia y su voluntad inquebrantable serán capaces de CREAR EMPLEO de calidad y sacar a nuestro país del pozo negro en el que se encuentra sumido. Sin dejar de admirar, en sus justos términos, a los “creativos” serán los “buenos gestores” los que proporcionarán estabilidad y posibilidades de desarrollo a largo plazo a nuestro tejido económico. Si ponemos todo el esfuerzo en apoyar la creatividad y dejamos de lado la formación de buenos gestores podemos garantizar el fracaso a medio plazo y una nueva “gran crisis” en el horizonte de los 7 a 10 años próximos futuros. Abandonemos los viejos clichés y apoyemos sin ambages la aparición y la formación de una nueva generación de EMPRESARIOS con todas la virtudes necesarias para resistir la tentación del “pelotazo” o del “éxito express”, suficiente y eficientemente preparados para el futuro y capaces de tomar las riendas de los negocios generados por los Emprendedores para desarrollarlos, consoldarlos, hacerlos crecer y garantizar su viabilidad a largo plazo. ¡El futuro está en manos de los nuevos Empresarios! Un atento saludo.

CEDEC 18/09/2013

Estamos de acuerdo con su comentario en el aspecto de que se habla demasiado poco o en un sentido no siempre positivo de los empresarios y mucho de los emprendedores. Sin embargo, comprendemos que en el actual contexto económico y laboral la aparición de emprendedores resulta una muy buena alternativa. Además, no podemos olvidar que los actuales empresarios en algún momento fueron emprendedores, y también entonces muchos de ellos no triunfaron en su primer proyecto. Desde CEDEC apoyamos y valoramos a los empresarios, como eje fundamental de la economía de este país; pero también valoramos a los emprendedores, muchos de los cuales serán los empresarios de los próximos años y consideramos que su esfuerzo y capacidad para asumir riesgos supone una apuesta para superar la actual situación económica. En resumen: nuestro reconocimiento a los empresarios actuales y a los futuros, aunque ahora sean únicamente emprendedores.

Subscriu-te a nostra newsletter!

Rebràs notícies mensuals sobre gestió estratègica empresarial i casos d'èxit dels nostres clients.